No puede ser un debate ético ese del uribismo y el santismo. Es un debate político. Olvidar la política, por muy despreciable que parezca, terminará en que nunca haya debates éticos
La solución a los cultivos ilícitos y sus males no está vinculada al herbicida utilizado, sino en la gente, en el campesino que debió transformarse en plantador o raspachín
Como en la era pos-Obama, tras el fin del mandato del nobel, la vibración cambió a un polo peligroso, guerrerista, reivindicativo, rencoroso, berrinchudo y bravucón
El exgerente de las 2 campañas y detenido en La Modelo, logró un preacuerdo con la Fiscalía con el que se sacrifica, pero salva a Santos y su responsabilidad como gobernante