El poderío chino empieza a sentirse en Brasil con Lula como gran aliado, pero negocios en Perú, Argentina, Chile, Honduras, Venezuela y Colombia se han multiplicado
Por lo que se ve la derecha ha puesto en marcha una estrategia con objetivo máximo lograr la destitución vía judicial del presidente y como objetivo mínimo: acosarlo
La convocatoria de Lula dejó la sensación de que en integración se está recomenzando de cero y habrá que recorrer otra vez el camino andado en los últimos 20 años