En el gobierno de Iván Duque los escándalos de contratación parecieran no dar tregua. El último tocó a su jefe de gabinete, María Paula Correa, con la caída de su asesor de máxima confianza, Andrés Mayorquín. Después de que sacaran al aire la decena de contratos que logró su esposa desde su llegada al gabinete presidencial en 2019 -al parecer con pocos méritos- una bola de nieve se formó en presidencia acabando, por ahora, con su carrera pública que tiene más de 10 años. ¿Quién es el abogado que “abusó de la buena fe” –según la jefa de Gabinete– de la mano derecha de Duque?
Su trayectoria en lo público se remonta al 2008 cuando estuvo de administrador en la Alcaldía Local de Teusaquillo en la administración de Samuel Moreno, luego pasó por el Instituto de Desarrollo Urbano, hasta que logró empezar a codearse con ‘las grandes ligas’ como Abogado Asesor Profesional en el Senado de la República junto al exsenador y pastor del Centro Democrático, Orlando Castañeda Serrano en el 2014, cuando el Centro Democrático se estrenó como partido logrando un poco más de dos millones de votos, convirtiéndose en el segundo más votado del país y consolidando una importante bancada de oposición al segundo gobierno de Santos.
Allá, dentro de la bancada del partido uribista, apoyó en la asesoría de los proyectos relacionados con la Justicia Especial para la Paz, sistema legal y de resoluciones así como temas de Código Nacional de Policía y Convivencia, Código de Ética y Disciplinario del Congresista, Código de Extinción de Dominio. En ese periodo con los 20 senadores que lograron poner, entre ellos el hoy presidente Duque, trabajó codo a codo con el mismo Álvaro Uribe y el senador Honorio Miguel Enríquez. Logró contactos que lo llevarían más lejos en el contexto de lo público.
Con la fuerte oposición de su partido político al acuerdo de Paz ya en 2016, Mayorquín se metió también en la pelea cazada con el entonces presidente Santos. Fue asesor jurídico y económico de la Mesa del NO con el Centro Democrático. Con sus mentores estuvo en la estrategia del voto evangélico, clave en la victoria del 'no' y sector político que le daría vía en su siguiente puesto como Asesor IV UTL en el mismo Senado, ahora al lado del pastor y hoy precandidato presidencial John Milton Rodríguez en 2018.
Paralelamente con sus trabajos en lo público y su trabajo de docente en la Universidad de la Sabana, montó una empresa con millonario capital autorizado en Tunjuelito junto a su esposa: Link Consultores. La sociedad se constituyó mediante el 23 de febrero de 2019, y se dedica al servicio de asesoría y consultoría empresarial privada y pública en casi todas las áreas, desde jurídica y financiera hasta marketing estratégico o mercadeo, pasando incluso por el novedoso coaching empresarial y la intermediación comercial.
Del senado pasó también a la Unidad para la Atención y Reparación Integral de Víctimas en cabeza del entonces recién posesionado Ramón Alberto Rodríguez. Tuvo otro par de experiencias en el Senado hasta que dio su gran salto al DAPRE, con la llegada de Iván Duque a la presidencia.
Como asesor de máxima confianza de María Paula Correa, jefe de gabinete de Duque, sus principales funciones eran el seguimiento a los diferentes proyectos de ley de iniciativa gubernamental, así como el relacionamiento entre la Presidencia y las demás entidades del gobierno nacional en asuntos legislativos. Estando adentro logró empezar un fortín de contratación con su esposa que le terminó costando la cabeza.
Su esposa Karen Vaquiro en 19 meses firmó 24 contratos que suman 1,245 millones de pesos. Por el régimen de inhabilidades e incompatibilidades no podía firmar dos de esos contratos. El modus operandi implicaba negar que estaba en una relación hasta después de asignado el contrato, cuando hacía la aclaración. Todo esto mientras que Andrés Mayorquin trabajaba en el DAPRE como asesor, incluso logró firmar uno con el mismo DAPRE en la Consejería Presidencial para Personas con Discapacidad por 53 millones y otro con la misma Consejería por 44 millones. Y aunque María Paula Correa aseguró desconocer lo que estaba sucediendo, le costó su cabeza y, por ahora, truncó su trayectoria en lo público, así como los millonarios contratos de su esposa.
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