Cuando todos me preguntan por quién votaré en octubre me dicen: “va perder el voto”.
Votaré por alguien nuevo en la escena política, alguien sin ataduras, sin deudas políticas como las tienen quienes se lanzan por un partido político tradicional, votaré por un candidato por firmas (tranquilos que no es Peñalosa). ¿Y por qué así?, por la sencilla razón que quiero alguien diferente, no creo que el “sancochito” me quede diferente si uso los mismos ingredientes y la misma técnica.
Es posible que esos movimientos independientes tengan simplemente una consigna personalista, sin un trabajo de mayorías detrás, sin una sociedad organizada, vibrante, apasionada y que cree que se puede. Se conforman con pocos, tal vez muchos de ellos soñadores, queriendo ver cómo cambian las cosas. Son unos locos realmente, pero son esos locos que tomaron la decisión de hacer algo por la ciudad, por rescatar la política de las garras de la politiquería.
Por las anteriores reflexiones, votaré por una de esas iniciativas independientes, que no se encuentran amarradas y que no usan los TLC’s como campaña (Tamal, Lechona y Cerveza o Tejas, Ladrillos y Cemento). Prefiero, como dicen muchos: “perder el voto”, seguramente encontraré algo diferente en ellos; y no, perder el voto intentando lo mismo con los mismos.
Si ustedes no desean perder el voto como yo, lean, vean los debates, analicen a los independientes y tomen la mejor opción. Si ese 25 % de votos en blanco que muestran las encuestas toma la decisión de elegir un candidato que no haya hecho política, tendremos un alcalde distinto, diametralmente opuesto y sin tener que rendir cuentas a los que nunca se presentan a las elecciones pero manejan el país.
Una adición a la receta. El concejo es muy importante para la ciudad, le hace contrapeso al alcalde y más del 50 % viene del carrusel de la contratación o de otros muchos escándalos. No votemos por los mismos, cambiemos y miremos a otra parte, seguramente nos llevaremos una gran sorpresa y las cosas empiezan a cambiar. Unidos podemos hacer que las cosas pasen.
